Todo los años visitamos la Cantabria infinita, su interior sus pueblos y bosques. Probamos su gastronomía, su cocido montañés, sus postres…Cada año volvemos pues nos atrapa esta tierra, llena de duendes, ogros y brujas entre masa forestal y campas con ganado que siempre nos acoge de la mejor manera. Un abrazo a los asistentes a este taller un año más, por compartir vivencias, inquietudes y una pasión común. La fotografía.
De lo acontecido aquí hay un breve selección.