
Aunque las previsiones meteorológicas de viento no eran considerables (29km/hora), el jueves 14 de enero, tuvimos pocas oportunidades para poder colgar la cámara en los trípodes, y más bien nos tocó recorrer como reporteros ávidos a pulso y aprovechando las luces del temporal extremo algunas localizaciones al abrigo, evitando las fuertes rachas de viento que tuvimos durante la jornada.
Sin embargo y aunque las grullas no nos dejarom más que unas rápidas siluetas del atardecer, que finalmente quiso despejar levemente, el día transcurrió lleno de buenos momentos en los que los asistentes llegados de Ejea, Valencia, Gerona y Zaragoza, pudimos disfrutar de un buen cocido de garbanzos y morcilla, en la fonda de Used, con unos huevos fritos con longaniza de segundo, por si fuera poco… para coger suficientes calorías en una fría jornada que nos llevó esta ocasión Gallocanta. (4º sobre cero, pero con una sensación térmica muy inferior por e viento).
Desde aquí agradecer a Eduardo, Julián, Helena y Juanjo su compañía y ayuda en una de las ocasiones que nuestro vehículo a pesar de la tracción «inteligente» se quedó atrapado en uno de nuestros accesos a la Ermita, barados en la pista por la nieve acumulada. En fín, una aventura que seguramente no olvidaremos y que terminó bien gracias a los guardas de Sodemasa que nos ayudaron a sacar el vehículo de allí, para proseguir con el atardecer.
Aquí os dejo con alguna de las instantáneas para dar testimonio, como siempre de algo de ese paisaje típico y frío de Gallocanta (según los más mayores del lugar, la mayor nevada desde el año 1954) y a la espera que me manden alguna de nuestro pequeño percance que como toda aventura fotográfica tienen un hueco para el recuerdo.

La próxima salida para Gallocanta, el 4 de febrero, esperemos que con mejor tiempo.